Violencia ejercida de forma indirecta a través de símbolos, valores y creencias que justifican y legitiman la violencia estructural. Se ejerce dependiendo de la posición social de cada miembro de la jerarquía y se inscribe en los actos y modos inconscientes o tácitos. La violencia simbólica está representada por acciones discriminatorias que justifican y legitiman la superioridad étnica, cultural, de género o religiosa de la figura o grupo dominante. La violencia simbólica es un instrumento de control social que lleva al mantenimiento del orden social existente, pero puede ser una de las causas aceleradoras y legitimadoras de la violencia directa. El término fue acuñado por Pierre Bourdieu y ha sustituido progresivamente al término violencia cultural, formulado inicialmente por el sociólogo noruego Johan Galtung en 1969.